martes, 26 de junio de 2018

Los principales hongos en tu marihuana


La marihuana puede verse afectada por distintos factores, como son las inclemencias del tiempo, las plagas o los hongos. Este este caso van a ser los hongos, los protagonistas.
Los hongos son una clase de organismos vivos muy antiguos, que entran dentro del reino de los Fungi. Por lo general aparecen en lugares sombreados, con bastante calor y una humedad elevada.
Esta clase de vida se reproduce a través de esporas, que viajan por el aire, esperando el momento adecuado para poder desarrollarse.
Oidio: Es un tipo de hongo muy común en los cultivos de marihuana. Lo reconocemos muy rápido debido a que empezamos a ver unas motas de polvo blanco en las hojas. Poco a poco este polvo va aumentando, y va apareciendo cada vez más en tus plantas. Lo más común es que aparezca en cultivos con humedades excesivas y de mucho calor. Se alimentan absorbiendo los nutrientes de nuestras hojas, hasta que finalmente las secan. No es precisamente un hongo agresivo, pero que puede ser muy perjudicial si no se erradica y llega hasta nuestros cogollos. Desaparece con facilidad tras usar funguicidas para su eliminación. Aunque lo mejor será que no dejemos ni que aparezcan. Si por otro lado ya ha llegado a tus flores deberemos desecharlas, de esta manera nos evitaremos problemas de salud provocados por dicho hongo.
Mildiu: Hongo que ataca a tus plantas de forma parecida al oidio. Aparece en ambos lados de las hojas, llegando a los tallos, y finalmente a los cogollos. Lo podemos detectar encontrando manchas amarillas en las hojas(a veces encontramos también una capa de polvo blanco por el envés de las hojas). En este caso contamos con un hongo que le gusta la humedad alta y una temperatura inferior a 30ºC, para poder desarrollarse. Le gusta a las plantas tanto en crecimiento como en floración, siendo las más recientes las que más le gustan. Es muy peligroso para nuestras plantas, y puede acabar con ellas en pocos días. Uno de los motivos, por los que prolifera el Mildiu, es por los restos vegetales presentes entre nuestras cepas. Para combatirlos, aparte de tener la zona de cultivo limpia, podemos usar insecticidas indicados para ello. Siempre será mejor evitar que aparezca, ya que aunque lo consigamos eliminar, ya habrá afectado bastante a nuestras plantas.
Botrytis: Es un hongo que por lo general lo encontramos en nuestros ejemplares cuando estamos en la fase de floración. Cuando ya ha terminado el verano, y comienzan las primeras lluvias, es cuando es más fácil que aparezca. Es simple de detectar, se observa un aspecto marrón o gris, como si la planta se hubiera muerto por esa parte. Se extiende rápidamente por nuestras cepas dejando totalmente inservible la parte por donde avanza. Ventila bien tus plantas para evitar que aparezca. En el caso de contraerlo tendremos que cortar y eliminar las partes afectadas, y aun así puede aparecer en cogollos sanos. La Botrytis es un hongo muy resistente y destructivo, puede arruinar tu cosecha. Se puede llegar a encontrar incluso en el proceso de secado y curado. Las índicas son las variedades que más veces lo tenemos presente, debido a que estas son plantas con flores más compactas(al ser más compactas traspiran menos).

Negrilla: Este tipo de hongo provocado por tener plagas en tus ejemplares, como la de mosca blanca o la de pulgón. Estos insectos secretan una sustancia pegajosa, que es la que provoca que se cree el hongo Negrilla. Teniendo nuestras plantas sanas y libres de plagas, no lo contraeremos. En el caso de tenerlo en nuestras plantas, deberemos primero de erradicar la plaga de insectos. Una vez hayamos acabado con la plaga pararemos el avance del hongo, y probablemente se morirá. Si queremos aumentar las posibilidades, deberemos de lavar nuestras plantas con un poco de jabón y agua.
Fusarium: Hongo que es muy problemático en los cultivos de marihuana, pues no tiene cura y sus efectos son desastrosos. Nuestras plantas lo pueden contraer a través del agua de riego, esquejes, o cualquier instrumento infectado. El Fusarium perjudica nuestras plantas, afectando al tejido de nuestras plantas, encargado de trasporte de fluidos. De este modo nuestras plantas no podrán alimentarse correctamente, corriendo peligro de morirse. Primero nos daremos cuenta, porque las hojas más bajas empiezan a amarillear. Posteriormente irán secándose las hojas, hasta que al final se caerán. Cuando la planta se quede totalmente sin hojas, la planta se morirá del todo. Todo esto ocurre en pocos días, y encima es un hongo que no tiene cura. Lo mejor que se puede hacer es mantener todo bien higiénico, para intentar que no aparezcan. En el caso de aparecer, desechar las plantas afectadas, para no correr peligr0o de perder todo el cultivo.

jueves, 21 de junio de 2018

La marihuana y sus distintos tipos


La marihuana es una planta que se conoce desde la antigüedad. Se ha cultivado en distintas partes del mundo, y con diferentes modalidades. Tiene cualidades psicoactivas y medicinales, por lo que podemos darle ambos usos. Hoy en día es difícil encontrar un ejemplar puro, pues se han ido haciendo híbridos, con tal de mejorar genéticas y hacer nuevas variedades. De todas formas os vamos a explicar los 3 grupos, en los que dividimos la marihuana según su procedencia.


Sativa: La marihuana sativa es un tipo de cannabis que procede de lugares tropicales de África, Asia y Ámerica. Son plantas de hojas largas y finas, con muchas ramas, distancia internodal larga y una gran altura. Esto se debe principalmente al entorno donde se encuentra, debido a que es una zona húmeda y calurosa. Esto hace que las plantas puedan traspirar mejor y a su vez darle el sol hasta la parte más baja. Sus cogollos son abiertos y alargados, de esta manera se secan con facilidad, reduciendo la posibilidad de que aparezcan hongos. Es resistente al mal tiempo (lluvias y frío) y su periodo de floración es realmente largo (superando las 10 semanas de floración). Su sabor es realmente exquisito, de normal notamos algún toque alimonado y especiado. El efecto que producen es cerebral, produciendo un estado activador y creativo. Se suele usar para desempeñar funciones que requieran potenciar la imaginación.
Índica: Este tipo es originario de zonas con climas muy secos y áridos, como son Afganistán, Pakistán y la India. Las variedades índicas son ejemplares de porte medio-bajo, estructura fuerte, una distancia entre nudos muy corta y las hojas anchas. De esta manera las plantas aguantan mejor el agua, y no la pierden tan rápido debido al calor extremo y la baja humedad. Las índicas tienen un periodo de floración más corto (menos de 9 semanas) que las sativas, debido a que el verano es más corto en estas regiones. Lo bueno que tienen es que las cortaremos antes, pero por otro lado serán más sensibles a los ataques de hongos, debido a sus densas y prietas flores. Sus sabores son más dulces, llegando a recordar a algunos hachises. El efecto que tiene es potente también, pero en otro sentido. Nos produce un estado de relajación que ronda por todo nuestro cuerpo. Muy útil medicinalmente, como para problemas de insomnio o de dolores musculares.
Rudelaris: Esta planta es de las últimas plantas descubiertas, pero que gracias a ella se han podido hacer buenos trabajos. Proviene de lugares de frío extremo, como son Siberia o Kazajistan. Temperaturas tan bajas, poca intensidad lumínica y veranos muy cortos, hizo que estas plantas se aclimataran a este ambiente. Los ejemplares de rudelaris crecen en un tiempo muy corto, y pueden florecer independientemente del número de horas de luz que haga. Esto quiere decir que, cuando la planta tenga una cierta vejez empezará a florecer por si sola. Aparte de esta característica no tiene ninguna más a destacar. Su altura es muy baja, no produce casi flores, sin sabor y efecto inexistente. Por otro lado como hemos dicho al principio ha servido para hacer mejoras, como la invención de las plantas Autoflorecientes y las Fast Version.

martes, 19 de junio de 2018

TRES VARIEDADES TOTALMENTE SATIVAS


La marihuana es una planta de la cual podemos encontrar muchas variedades. Cada una de ellas tiene sus características de estructura, sabor efecto, etc. Hoy en día existen híbridos, con mayor porcentaje de índica o de sativa, e incluso con la misma proporción. Cada vez quedan menos variedades que sean totalmente sativas o índicas, debido a querer mejorar las genéticas y hacer nuevas variedades. En este artículo vamos a mostrar 3 variedades que son 100% sativas.

Kali Mist: Variedad feminizada del banco Serious Seeds. Es una ganadora de múltiples premios, como el de 1º premio en la categoría Best Hash, de la copa Cannabis Champions Cup 2012. Se caracteriza por ser una planta de porte alto y con muy pocas hojas. Aguanta bien las inclemencias del tiempo y las bajas temperaturas. Tiene resistencia a los hongos y produce cogollos con tricomas en abundancia. La podemos cultivar en interior y en exterior, pero en tu armario tendrás que controlar su altura. Tiene una floración de unos 85 días dentro y en el exterior nos esperaremos hasta finales de noviembre. A pesar de su larga floración valdrá la pena esperaros, pues podremos disfrutar de un sabor incensado y de un fuerte efecto medicinal. Con ella podrás levantar el ánimo, usarla para dolores musculares, entre otros.
Dr Grinspoon: Es una cepa del banco de semillas Barney´s Farm. El nombre que tiene fue en honor al investigador Dr Lester Grinspoon. Es una de las sativas puras que menos se conoce y de las más raras. La podemos cultivar tanto en armario como en exterior, pero será necesario que sujetemos su tronco y ramas, pues su estructura es fina y de poca resistencia. Tiene una floración de unos 3 meses y poco, teniendo que esperarnos a mediados de noviembre en exterior. No veremos recompensados después de tanto tiempo, obtendremos cogollos en forma de pequeñas bolas, pero por todas las ramas de la planta. Al tardar tanto en florecer conseguimos ejemplares con gran sabor y potencia. El sabor es especiado-alimonado, que al fumar rato el humo nos recuerda a frutas tropicales. Su efecto es realmente potente, produciendo un estado activo de larga duración.
Golden Tiger Fem: Semilla feminizada del banco Ace Seeds. Este es un polihíbrido, del cual se escogieron sativas puras de Malawi y Tailandia. Gracias a esta combinación, tenemos como resultado una planta de gran altura y ramificada. No se recomienda aportarle demasiado nitrógeno, si no queremos excedernos en la altura. Cultivada en indoor recomendamos ponerla en fotoperiodo de floración nada más las germinamos, y utilizar una malla tipo scrog, de esta manera podremos controlar su altura. Tiene resistencia a las altas temperaturas y también a las bajas. Por otro lado también será difícil que coja algún tipo de plaga o de hongo. Su distancia internodal es larga, y sus hojas finas y alargadas. Una vez la probamos no llenará la boca de sabor, un toque alimonado con pequeñas trazas picantes. Esta genética cuenta con un gran poder psicoactivo, apto para los consumidores más habituales. Nos deja con un estado cerebral y estimulante, que perdurará bastante rato.

martes, 12 de junio de 2018

LA RESINA DE LA MARIHUANA Y SUS PRINCIPALES COMPONENTES


La planta de marihuana contiene varias partes, y en este caso vamos a hablar de la resina.
Los tricomas de resina son unas glándulas que se encuentran en las flores (cogollos) y hojas cercanas a ellas. Cubren todos los cogollos de las plantas, y vistos en un microscopio, tienen una forma de chupachup. En dichos tricomas es donde se formarán los cannabinoides (CBD, CBN, THC, THCV, CBG…). Dependiendo de lo madura que esté la resina, variará la cantidad de terpenos y la concentración de cannabinoides. Lo que tendremos que hacer, es esperar hasta que la planta haya terminado por completo la floración, cuando tengan casi todos los tricomas un color blanquecino, sin llegar a ponerse color ámbar. Haciendo esto conseguiremos cosechar flores en su punto óptimo, ganando en sabor, olor, potencia y producción.

Principales componentes:
Terpenos: Los terpenos son los compuestos orgánicos, encargados de que la marihuana tenga olor y sabor, es lo que llamamos aceites esenciales en nuestras plantas. Existen gran cantidad, y dependiendo de los que tenga nuestra marihuana, tendrá un sabor u otro. Algunos de los más comunes en ejemplares de cannabis son: limoneno, pineno, mirceno, beta, cariofileno, careno y humuleno.
Tetrahidrocannabinol (THC): Es la principal y mayor cannabinoide que encontramos en la resina del cannabis. Debido a él la marihuana produce un efecto psicoactivo, a quien la consume. Dependiendo de la cantidad de THC que contenga la planta, producirá mayor o menor efecto. Si por otro lado no contiene nada de THC, el efecto será inexistente. A parte de producir un colocón, también nos puede ayudar de forma medicinal. Por ejemplo podremos aumentar nuestra sensación de apetito, o para levantarnos el ánimo.
Cannabidiol (CBD): Cannabinoide de la marihuana que solemos tener presente en menor cantidad que el THC. Se conoce por tener gran cantidad de usos terapéuticos. Gracias a su interés medicinal, se han ido produciendo variedades con mayor cantidad de CBD y un índice de THC menor. El cannabidiol actúa reduciendo efecto psicoactivo del THC, pero a su vez hace que se prolongue durante más rato. Otro dato a destacar es que es estable, pues no se oxida con facilidad como el THC. Algunos de sus principales usos medicinales son: analgésico, antiinflamatorio y ansiolítico.
Cannabichromeno (CBC): Este cannabinoide es muy extraño y a parte no produce ningún efecto psicoactivo. No está presente en todas las plantas de marihuana, y en los casos que si está, su cantidad es mínima. Aún se tiene que estudiar mucho sobre él, pero algo que si se tiene claro es que su potencial medicinal es muy alto. Es un potente antidepresivo, siendo bastante más efectivo que el CBD. Produce un estado de relajación y aumenta el poder analgésico que tiene el THC. Para casos de dolor de cabeza y problemas para poder dormir, nos funcionará muy bien.
Cannabinol (CBN): Cannabinoide que se produce, cuando el THC de nuestra marihuana se oxida. Su efecto es casi nulo, produciendo la décima parte del colocón que tiene el THC. Una hierba con un alto CBN puede ser causado, por cortar una planta demasiado madura, un secado brusco con rachas de aire y la luz solar. El CBD a pesar de no tener efecto psicoactivo, puede provocarnos vértigos, desorientación o sueño. Medicinalmente nos irá bien como antioxidante, más eficaz como analgésico que el THC, etc. No nos interesa que nuestra hierba contenga un nivel alto de CBN, si no eso querrá decir apenas contendrá THC(es decir casi sin psicoactividad).
Cannabigerol (CBG): Es un cannabinoide que tenemos de normal presente en la plantas de marihuana. No produce ningún efecto psicoactivo, y en su forma ácida sirve de precursor del THCA y del CBDA. Por este motivo lo solemos encontrar en cantidades inferiores al 1% en las plantas. Lo podemos encontrar en mayor cantidad, en las plantas de cáñamo destinadas para hacer textiles. El CBG tiene también usos terapéuticos: antibiótico y antibacteriano (con mayor efectividad que THC, CBN y CBD), tratamiento glaucoma (reduce la presión en el ojo), etc.
Tetrahidrocannabivarin (THCV): Es un cannabionide que no lo encontramos en todas la plantas de marihuana. Lo podemos encontrar sobre todo en variedades de alta montaña, de zonas de Asia y África del sur. Al llegarles mayor cantidad de rayos ultravioleta a las plantas, éstas producen mayor cantidad de THCV. Funciona alterando los efectos psicoactivos, pues hace que el colocón del THC sea más rápido y más potente. El THC aumenta el apetito y el THCV lo disminuye, por lo tanto el ratio entre los dos cannabinoides, será el nivel estimulador que tenga nuestra hierba. Sabiendo esto último podemos ver que también sería útil medicinalmente. Nos servirá para reducir el apetito (obesidad o sobrepeso), para tratamiento de diabetes tipo 2, analgésico…

viernes, 8 de junio de 2018

Pan cannábico y artesano


En el mundo de la cocina hay muchos platos culinarios y recetas. En este caso os vamos a enseñar hace algo, que tenemos presente en comidas, meriendas, almuerzos… El alimento estrella es el pan, pero en este caso no vamos a ver como se hace un pan normal, sino como se hace unos con contenido en cannabioniodes.

Como hacerlo:
Primero para hacer el pan con marihuana, vamos a tener que conseguir que la potencia del cannabis pase a un ingrediente de preparación. En este caso el ingrediente portador será aceite. Tendremos que coger un tarro de cristal y le verteremos unos 10-15ml de aceite, y añadiremos 3g de marihuana machacada. Pondremos el tarro en un cazo con agua para calentarlo al baño maría. Lo dejaremos a fuego lento (no dejar que hierva), e iremos removiendo de vez en cuando. Pasada una media hora ya tendremos nuestro aceite con los canabinoides. Solo nos quedará filtrar nuestro aceite, para quitar toda la materia vegetal.
Después tendremos que coger un bol grande y pondremos la levadura, mantequilla y harina y lo removeremos. Enseguida echaremos el aceite cannábico y el azúcar, volviendo a mezclar todo bien. Este será el momento de que añadamos los últimos ingredientes, el agua y la sal. Tendremos que mezclar todo bien con las manos, lo que viene ser amasar. Una vez tengamos la masa preparada, la dejaremos reposando durante unos 20 minutos.
Cuando ya haya reposado, podemos poner unas semillas de cáñamo. De esta manera aportaremos más nutrientes al pan y le daremos un toque más cannábico. Tras añadir las semillas tendremos que dar la forma deseada al pan, y pondremos el horno a calentar. Meteremos nuestro pan el horno (200ºC) y lo dejaremos hay durante tres cuartos de hora. Pasados los 45 minutos apagaremos el horno y ya tendremos nuestro pan horneado.
Dejaremos que se enfríe y ya podremos probarlo. Puedes comerlo sólo o con lo que tú quieras, pero como todas las comidas cannábicas tiene su efecto. Controla el pan que comes, si no quieres caer rendido ante los efectos de tu marihuana. También puedes ir jugando con distintas cantidades de marihuana hasta que encuentres la que tú quieres (ya sea más potente o más suave).
Ingredientes:
  • 200g de mantequilla
  • 8g de sal
  • Semillas de cáñamo(es opcional)
  • 0,5L de agua
  • 50g de levadura
  • 1k de harina
  • 5ml de aceite de oliva cannábico


martes, 5 de junio de 2018

Cultivo de interior en verano


El mundo del cultivo de la marihuana es muy extenso. Tenemos diversas formas de cultivar nuestras plantas de cannabis. Las dos modalidades más distinguidas, son la de interior y la de exterior (con sus distintas variaciones). En este artículo vamos a ver cómo llevar a cabo un cultivo de interior, pero en este caso será en el periodo del verano. Cuando se acerca el calor, la gente apaga sus luminarias, para continuar cultivando después del verano. Esta época del año, las temperaturas son muy elevadas, por lo tanto las de nuestro interior aun serían superiores (saldría marihuana de pésima calidad, e incluso llegarían a morir).

Como todo, esto también tiene algún truco, para que podáis tener vuestro armario encendido, y poder tener una cosecha en verano. Lo primero como en cualquier cultivo de indoor, tendremos que buscar la parte más fría de la casa. Una vez decidamos la zona de cultivo, nos pondremos con la instalación para dejarlo todo preparado. Ten en cuenta que por el día hará más calor, por lo que deberás encender el cultivo cuando sea de noche (truco para bajar un poco la temperatura). Teniendo el interior montado (imprescindible usar termohigrómetro, nos pondremos a elegir lo que vayamos a cultivar. Nos decantaremos por variedades de climas cálidos y con ambiente seco.
Este será el momento de ver que luminarias vamos a utilizar. Los halogenuros los podremos usar para crecimiento, ya que ahorramos luz y generamos menos calor (luminaria apta sólo para fase vegetativa). Si usas los focos tradicionales de HPS (alta presión de sodio), nos hará falta un aire acondicionado de gran potencia. Los focos de sodio desprenden mucho calor, y si no se no hará imposible cultivar en verano. Otra luminaria con la que podrás cultivar es el Led, no genera a penas calor y emite un espectro específico para las plantas. Con el Led no hará falta usar aire acondicionado, así que ahorraremos energía, pero sin perder calidad. Una luminaria que lleva poco en el mercado son los LEC o CMH (halogenuros metálicos cerámicos). Estos Lec emiten una luz perfecta para las plantas, pues sólo está compuesta por colores absorbibles por nuestros ejemplares. De esta manera usaremos la mitad de potencia que en un foco de 600W, pero obteniendo aproximadamente la misma producción. Al gastar la mita de potencia, se genera mucho menos calor, siendo una buena luminaria para el cultivo de verano. Si aun así hace algo de calor podemos poner un aire acondicionado, pero de menos potencia que con un HPS.
Deberás visitar la sala de cultivo más a menudo, y fijarte que no pase sed ninguna planta(puedes darles pulverizadas con agua para aumentar su hidratación). Una sequía puede ser terminar, en este tipo de cultivo veraniego. Regaremos con abundante agua y más menudo, que en un interior de invierno(al hacer más calor se evaporará más rápido y las plantas también beberán más). Si vemos que la humedad es demasiado baja, será necesario usar un humidificador. Subiendo la humedad, tus plantas se desarrollarán mejor y no pedirán tanta agua.
Llevando unos buenos parámetros de cultivo, obtendrás buenas cosechas en pleno verano, cuando nadie se pensaría que se podría cultivar en interior.